El casillero, percepción intermodal
A muchos de nosotros nos habrá ocurrido que, de forma inconsciente (al escuchar una canción, por ejemplo) nuestro cerebro guarda información (¿metadatos?) sobre ella: la letra, la percusión, la melodía...
Si es la primera vez que escuchamos esa canción, dicha información es guardada en nuestra memoria junto a datos que no están directamente relacionados con la canción: nuestro estado de ánimo, nivel de cansancio, olores o perfumes...
Al parecer, a este efecto se le llama percepción intermodal y se basa en que, posteriormente, cada vez que volvamos a escuchar esa canción, «reviviremos» las emociones guardadas junto a esa canción, la alegría o tristeza de aquel momento, etc...
Dicho de otra forma, nuestro cerebro hace el papel de un gigante archivador que contiene miles y miles de casillas vacías. Al escuchar una canción, la guardamos en una de esas casillas junto a lo que percibíamos en ese momento (emociones, sentimientos, etc..).
Posteriormente, al escuchar la canción (abrir la casilla) recordaremos inconscientemente todo lo sucedido en ese entonces porque está ahí almacenado.
A raíz de este curioso procedimiento, nace El casillero, una sección que podrán encontrar en el menú de la derecha, gestionada por mi buen amigo Salvador, que se encargará de ir publicando ciertas canciones que harán que nos trasladen a momentos pasados con emociones y sentimientos casi olvidados en la inmensidad de casillas de las que disponemos.